BE’LAKOR, la coherencia jamás decepciona.

En lo que sin dudas representa uno de los lanzamientos más esperados del año, el pasado 29 de octubre los australianos Be’lakor finalmente abandonan la cueva tras un periodo de hibernación de cinco largos años. Los apadrinados por el sello austríaco Napalm Records han publicado su quinto álbum de estudio titulado “Coherence”. Un trabajo recibido por sus fans con expectativa mayúscula. ¿Habrán sido capaces de estar a la altura de sus producciones anteriores?

Desde su formación, en la ciudad de Melbourne en 2014, su asenso ha sido igual de progresivo que uno de sus principales enfoques a la hora de hacer música. En primer lugar, su debut con el editado de manera independiente “The Frail Tide” de 2007. Luego, en 2009 ficharían con Prime Cuts para su quizás mejor disco hasta el momento, “Stone’s Reach”, lo que le abriera las puertas del mercado europeo de par en par. Otros dirán que su cúspide ha sido alcanzada con “Of Breath And Bone” de 2012, lanzado por Kolony Records. Aunque el gran salto lo dieron firmando para un mega sello como Napalm Records para la grabación en 2016 de “Vessels”.

Cinco años luego de su predecesor, Be’lakor irrumpe nuevamente en la escena con un trabajo sólido, con un caudal musical extraordinario y que va muy en la misma línea de sus últimas realizaciones. Estos australianos a través del tiempo han forjado un sonido e identidad propia, “Coherence” es nada más y nada menos que sesenta minutos de un acto de reivindicación de su propia esencia.

En primer lugar, “Locus” comienza con un primer minuto y medio de melodías entrelazadas que no hacen otra cosa que arar el terreno para la posterior explosión sónica de punteos en trémolos, batería trepidante y gruñidos atemorizantes. Un tema que explora múltiples paisajes sonoros desbordantes de musicalidad. El inmenso talento de estos artistas es incuestionable.

Continúan con “The Dispersion”, la primera de sus tres pistas donde no participa la impresionante voz de George Kosmas, además de “Sweep of Days” e “Indelible”. Quizás sea este el elemento más novedoso de “Coherence”, la inclusión de tres temas instrumentales, la misma cantidad que encontramos sumando todos sus trabajos anteriores.

Más tarde, “Foothold” posee un aura oscura y notoriamente progresiva. Mientras que con “Valence” Be’lakor nuevamente nos abriga con hermosas melodías (en eso no hay duda que son expertos). En efecto, los distintos ingredientes de la música de esta banda fluyen y se combinan entre sí de manera tan natural que nada parece estar fuera de su sitio. Y en ese encuentro de diferentes vertientes, la calidez de su faceta melódica es la que suele imponerse sobre la aparente frialdad de la latente vena técnica.

El testimonio de esto último se manifiesta rotundamente en “Hidden Window”. Este ha sido el primer adelanto del disco y a la elección no le falta lógica. Es una canción que lo tiene todo, el riff principal es una contundencia aplastante, mientras que a lo largo de los más de 8 minutos de duración se experimentan momentos muy emotivos (otro ítem en donde Be’lakor se destaca notablemente).

Por último, “Much More Was Lost”, el tema más largo del álbum y el más largo de toda la discografía del grupo, una canción que destila melancolía. Momentos como estos hacen que los más de 15 mil kilómetros que separan Melbourne de Helsinki se desvanezcan por completo.

En conclusión, la llegada del quinto disco de Be’lakor no defraudará a sus fanáticos en lo absoluto. Es cierto que este trabajo no será recordado en cuanto a su innovación, pero no es menos cierto que a “Coherence” le sobra solidez y riqueza musical para estar entre las mejores producciones del año.

Line-up:
George Kosmas – Voz, guitarra
Shaun Sykes – Guitarra
John Richardson – Bajo
Elliot Sansom – Batería
Steve Merry – Teclados

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