Dordeduh – HAR

De tierras Transylvanicas llega el segundo álbum de Dordeduh. Nacieron hace más de diez años de las entrañas de Negură Bunget, uno de los nombres más importantes de la escena de Black Metal Rumano, cuando Edmond Karban y Cristian Popescu decidieron emprender su propio camino. Un EP en 2010 y un alabado primer aábum en 2012 era hasta ahora la única producción discográfica de Dordeduh. 

HAR los pone en carrera nuevamente. Solo que los nueve años de espera no pasaron en vano. De haber salido a comienzos de 2010s, podríamos estar hablando de un album original y sorprendente. Hoy hay que sumarlo a una larga lista de todos aquellos que han empujado las fronteras del Metal. Es que el encuentro de elementos progresivos, electrónicos, rituales, de folk paganos con el Metal se ha potenciado en los últimos años. Thy Catafalque, el vecino Húngaro, ha aportado mucho en esa dirección. Pero los Dordeduh también generan unas atmósferas oxigenadas, amplias y extremas que hacen recordar, por ejemplo, a un Devin Townsend. Los fans del pelado loco debería chequear HAR.

Descãnt la tercer canción es la accesible y atractiva carta de presentación: melódica, intensa y con un poco de spokenword. Luego el á

lbum esta partido a la mitad por los 11 minutos de Vraci de Nord, que son monumentales, uno de esos temas que a uno lo vuelven orgulloso de poder escuchar con gusto esta música. Luego de una introducción llena de misterio, especialmente para quienes el Rumano le es ajeno, una voz limpia y melódica se abre paso para que por dos minutos entre con fuerza los riffs y una voz aguerrida. La ambición de Dordeduh se muestra en todo su esplendor al cerrar con una instrumentación de película, a la Hans Zimmer que deriva en un clima de fiesta rave primero y de música de cámara después.

Desfercat (abajo video) abre con los elementos tribales, la percusión y las caracolas, pero el tema luego es dominado por un espíritu lleno de alaridos y un bajo que es protagonista. Hasta que los sintetizadores generan un nuevo clima, que no es espacial, es como si uno estuviera encerrado entre dos pirámides recibiendo e irradiando energía. Eso sí, al final vuelve el metal. En los comentarios al video de una versión reducida de Desfercat alguien comento: Esto hace que quiera retirarme de la sociedad moderna y aislarme en un monasterio para practicar el crecimiento espiritual.

De nema vergur tiene un aire a metal progresivo muy marcado, con mucha experimentación y la búsqueda de componer un paisaje sonoro complejo que también puede alojar pasajes metálicos a modo de cable a tierra, a la sociedad moderna. El final invita a la meditación, con sintetizadores y un mantra. HAR merece dedicada atención y abre expectativas. Los Dordeduh se pueden consolidar como uno de los grandes nombres del Metal de Europa del Este.