Proyecto Bifröst – Onírico

 

Proyecto Bifröst – Onírico

Fecha: 27/08/2021

Sello: Bizarro Records

Tracklist:

1-Ascenso (1:18)
2-Ritual (4:09)
3-Bonanza (2:41)
4-Fast 4 War (3:55)
5-Boicot (5:58)
6-Hijos de la Abundancia (3:53)
7-Onírico (5:15)
8-Tauros (5:17)
9-El Siervo (4:02)
10-Flecha Verde (5:01)
11-Bienvenida al Mundo (6:13)

Hoy acaba de ser editado por Bizarro Records el disco Onírico, el primero de Proyecto Bifröst.

Al igual que su nombre, que recuerda a aquel puente de la Mitología Nórdica ( actualmente bastardeada y dada a conocer masivamente por el MCU de Marvel ) que unía la tierra de los Dioses ( Asgard ) con las tierras mortales ( Midgard ), esté Bifröst une las tierras gélidas de Alemania, con el clima húmedo de Uruguay, lugares donde viven los dos integrantes de este proyecto.

Este puente mágico, que según palabras de Diego, se podría definir como el hecho de haber compuesto, y grabado el disco 100% gracias a la actual “magia tecnológica” que les permitió hacerlo todo a distancia, nos transporta a una paleta musical bastante variada, con una carga lírica bastante emocional y comprometida.

Pero, primero que nada. ¿Quienes integran este proyecto?

Por un lado, desde Uruguay, y en voz, tenemos a Alejandro Spuntone, uno de los cantantes más reconocidos dentro del Rock Uruguayo. Fue el cantante de La Trampa, una de las bandas Uruguayas más queridas y exitosas. En los últimos años se había unido a Guzman Mendaro ( Hereford ), en principio para hacer reversiones de clásicos de la música Uruguaya en el dúo Spuntone/Mendaro, proyecto que sumó varios discos a su carrera, y luego de varios años siendo intérprete, tuvo su primer acercamiento a la composición con “El Resto de Nosotros” una banda formada entre otros, por dos integrantes de “Los Traidores”.

Ahora, enfrentar este nuevo proyecto lo hizo encarar de lleno a la composición lírica, y aparte lo hizo volver a sus raíces, a aquellos años noventa donde cantaba un heavy metal clásico con la banda Zener ( banda que tuve la suerte de ver en vivo en un concurso de Yamaha por el ‘94, y con la cual nunca había asociado a Alejandro, hasta hace unos pocos años ).

Por otro lado, desde Alemania, donde está viviendo hace unos 4 años, tenemos a Diego Caetano, quien se encarga de la música, mezcla, grabación y producción, él ha pasado desde tocar la batería en bandas de metal progresivo como “Proyecto Aleatoria” o “Elarcos”, a haber hecho cosas dispares, como participar como músico de Carnaval durante un par de años en “Los Choby’s”, o haber hecho música bizarra y explotar la viralización de videos en internet tanto con “Children of Dragon Maiden”, como con un proyecto creado por los músicos de “The Party Band” llamado “Barbyland”, para luego llegar a componer la banda sonora de “Apache”, una serie de Netflix sobre la vida de Carlos Tévez. Actualmente toca la batería en una banda progresiva Alemana llamada “Smalltape”.

Como cosa del destino, el empuje de Diego para empezar a estudiar música, en principio Batería, y con lo cual luego lo acercó al resto de los instrumentos, fue escuchar a “La Trampa” en su adolescencia.

Si bien los dos eran conocidos virtualmente, no pasaban más que de darse algún “like”, o algún breve comentario en un posteo en redes sociales. Pero por más contradictorio que parezca, su relación empezó a consolidarse cuando Diego se alejó de Uruguay. Increíblemente la distancia los terminó uniendo más.

Alejado de su país natal, Diego creció mucho personal y profesionalmente, ya casado, con una hija y con su propio estudio de grabación ( Patroden Studio ) mezclando y grabando instrumentos para músicos de diversos países, quizás le dió el empuje y la seguridad para mostrarle cosas a Alejandro, las cuales él no sólo le dio su aprobación, sino que le retrucó ofreciéndose a colaborar en algo juntos. Entre esas ganas empezaron a surgir ideas en una etapa pre-pandémica y luego, por culpa ( o por gracia ) del confinamiento que nos obligó a hacer este maldito virus durante los últimos años, hizo que el compromiso y la dedicación fuera más grande entre ellos, entablando diariamente contacto a distancia lo cual los enfocó en el trabajo del disco.

Como dijo Spuntone en una entrevista para Esdrújula TV: Onírico, es justamente la materialización de un sueño de ambos. Por un lado, la de Alejandro que quería hacer volver a hacer este tipo de música, y por otro la de Diego que quería hacer música con Alejandro.

Como dije al principio, el disco tiene bastante carga emocional por parte de los dos integrantes. El disco empieza con “Ascenso”, una caricia musical, un breve pasaje instrumental, que Diego compuso en un estado de melancolía, el dia que su hija retomaba sus clases de preescolar luego de meses de no poder hacerlo por culpa del aislamiento, ese día, sin su hija, luego de meses de no despegarse, fue uno que se sintió muy vacío, así que tomó su guitarra y Ascenso fue lo que le surgió.

Ritual” es la siguiente canción y rompe con fuerza esa breve y tímida intro. Es una canción que si bien tiene mucho aire, con partes cantadas con un bajo de fondo y una batería de acompañamiento, sigue con estribillos con cortes distorsionados con bastante peso y una bata mucho más elaborada hacia el final.

Bonanza” habla de la avaricia y desigualdad, es una canción con un ritmo un poco más picado, con una sección con un ritmo compuesto, lo cual puede complicar un poco seguir el ritmo, si tenías pensado peludearla. En el sólo de guitarra tenemos un invitado, nada menos que Norberto Ariola, guitarrista de ReyToro.

Fast4War” es la siguiente, la cual tiene un muy buen videoclip, una canción bastante directa y pesada, fue una que había compuesto Diego hace varios años atrás como banda sonora para un videojuego, pero que siempre quiso que tuviera voz. La música inspiró a Alejandro para hacer una lírica que habla del poder, la guerra y los negocios tras ellas.

Boicot” es la siguiente canción, con una lírica que tenía Alejando escrita hace tiempo que habla sobre dejar atrás los errores del pasado, a la cual Diego musicalizó. Una canción que podría perfectamente pasar por un track de Calaveras de La Trampa. En esta canción hay dos solos de guitarra, el primero y más melódico por el propio Diego Caetano y en el segundo tenemos a Federico Doglio como invitado haciendo un solo más movido.

Hijos de la abundancia” es el primero de los dos covers que tiene el disco, en este caso, propuesto por Alejandro, es una canción de la Música Popular Uruguaya, compuesta por Jorge Galemire en la música y Fernando Cabrera en la letra. Una canción pensada sólo para dos voces y una guitarra acústica. Recomiendo escuchar la versión original, para apreciar mucho mejor ésta versión. El trabajo musical de esta pieza creo que es de las mejor logradas de este disco.

Onírico” es una canción donde están plasmadas una vivencia de Alejandro y otra de Diego, o sea dos historias diferentes, pero contadas con las mismas palabras. En el caso de Diego el concepto trataría de la vivencia de los problemas burocráticos que sufrió durante su etapa migrante, tener que pasar meses sin poder ir a vivir con su esposa por demoras en aprobación de papeles por parte de gobiernos, leyes y funcionarios, y sentirse perdido en su propio País, alejado de lo que más ama. La historia de Alejandro va por el lado de un sueño que tuvo a razón de la pérdida de un ser querido. La canción tiene un arranque muy ambiental, bastante Floydeano, que luego cobra peso, pero sin exagerar en velocidad, a un pulso constante.

Tauros”, así como su nombre ya indica, habla sobre la cruel tauromaquia, y como sus insensibles espectadores, a pesar de ver muchas veces morir desangrado a un toro, sólo se preocupan cuando el herido es el matador. Es una canción con un sonido un poco más exótico, Diego usó la escala flamenca para meternos en ambiente, y es la única canción donde usa una guitarra de 8 cuerdas, quizás no sea la canción más pesada del disco, pero quizás sea la canción que podría considerarse más metalera del mismo. 

El Siervo” fue la primera canción, o más bien riffs, que le pasó Diego a Alejando como para empezar a trabajar, Spuntone se inspiró en la música y basó la lirica en una Pelicula que le quedó grabada, la cual toca el polémico tema ente la pedofilia y la religión. Doglio también solea en esta canción.

Se viene el segundo cover del disco, en este caso propuesto por Diego Caetano, y es una versión del clásico “Flecha verde” de Rubén Rada. La versión no apunta tanto hacia el metal, es más bien hard rockera, con mucho ritmo, sin salir demasiado del concepto original de la canción, con un sonido por momentos medio a Zeppelin quizás, y con Fede Doglio metiendo un gran solo hacia el final.

Bienvenida al mundo” es la canción que cierra el disco, y podríamos decir que es la canción con más toques progresivos del mismo. Dedicada a la hija de Caetano, el cual aparte de componer la música, es quien dio vida al concepto de la lírica, la cual terminó de darle forma Alejandro. Una canción dividida en 3 secciones, la primera se llama “Ecografía”, sería el descubrimiento, la etapa de querer imaginarse a su hija antes de su nacimiento, la segunda parte se llama “Imaginación”, Son todas las preguntas que le pasaron por la cabeza como padre en cuanto a imaginarse el rostro de su hija como pensar como sería la crianza ¿que enseñarle? ¿Que valores darle?, y la 3er sección es el “Parto”, el cual, tengo entendido que fue muy complicado e intenso para la madre, por lo tanto, en contraparte de las dos primeras secciones donde la música es totalmente ambiental, con Alejandro cantando bajo un mar de sintetizadores y pianos, con mucha influencia progresiva, acá la música se vuelve muy pesada, con un sonido que en principio me recuerda un poco a Leprous, con ciertos cortes, que suenan a ¿latidos cardíacos quizás?, para luego arrancar con todo, con una batería entrando al palo con doble bombo en un increscendo constante, con unas guitarras distorsionadas sin parar de sonar.

El disco es bastante directo, mucha influencia de todo tipo de metal, pero no 100% metálico. Es difícil no pensar en La Trampa al escuchar la voz de Alejandro tras una guitarra distorsionada, su sello es inconfundible. Yo creo que al fan de La Trampa el disco le resultará muy interesante. Dentro del público metalero creo que puede gustar, pero los metaleros solemos encasillar el metal dentro de ciertos parámetros o estilos, y esta banda tiene un estilo que no entra dentro de ninguno de ellos. Hay Rock, Hard Rock, Metal, Progresivo, Candombe. Lo importante creo yo, es que el disco tiene varias canciones muy buenas, algunas que quedan en la cabeza, y que valen la pena escuchar varias veces. 

Si bien todo el tema de las restricciones han echado por tierra la idea de que este año la banda haga algún toque en Uruguay, es una idea que sigue en pie, y que probablemente se concrete en el 2022. Lo que sí es seguro, es que Proyecto Bifröst tiene para rato. El dúo no para de estar en comunicación y sigue creando, incluso ya tienen maquetas como para ir preparando un segundo disco.

El disco se consigue tanto en disquerías como en la página web de la banda: www.proyectobifrost.com

 

1 Comentario

  • Jorge Tabeira
    27 de agosto de 2021

    Imponente!!!

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