Polyfrenetics: EP Debut desde Noruega

A veces los países llevan consigo géneros musicales. No? Convengamos que no es fácil desasociar a Noruega del Black Metal. Salvo que haya en sala algún fan de Conception, prog-power metal melódico de calidad. Parallel Minds (1993) un discazo. En fin, basta de digresión. 

Inesperado y refrescante

Hay cosas que no se esperan. Que llegan solas. El inesperado y refrescante EP debut de la banda Noruega de “prog y psychedelic punk” Polyfrenetics arranca con 20 20 Vision. A una batería nerviosa muy punkrockera, se le suman unas guitarras potentes que juegan virtuosamente entre el psychedelic rock y el garage rock. Luego, por un instante, en la segunda parte de The Creeper, el segundo tema, la figura reptilínea de Iggy Pop se me vino a la cabeza.

Para cuando comienza el lado b ya va quedando claro que los Polyfrenetics no son una banda de amateurs. En el jamming psych-punkrockero que practican hay mucha calidad y entrenamiento. Es que el guitarrista Are Linnerud y el bajista y vocalista Per Erik Sæter tocan juntos desde los años noventas. En el 2007 formaron Polyfrenetics.

Guilt in B Minor es una pieza elaborada, que busca lo progresivo, guitarras bien al frente, la voz es correcta, aunque no destaca. Lo mejor viene con el jamming de guitarras, que creo denotan mucho trabajo sobre el escenario. Es fácil imaginarse, pasando un buen rato, escuchando a los Polyfrenetics en un pub de Oslo.

El cierre del EP llega con Comfortably Dumb (Confortablemente mudo). Hola, Hola, teléfono para Roger Waters y David Gilmour. Si si. Los Polyfrenetics parecen tener sentido del humor, y se animan con esta sutil irreverencia al clásico de Pink Floyd. Aunque los doce minutos que dura Comfortably Dumb, nunca despegan. Ofrecen una cadencia de vuelo a baja velocidad, rasante en el desierto, un Stoner, a la Sleep, la banda de California, aunque mucho más accesible.

Este debut viene de la mano de Argonauta Records, un sello Italiano que se las trae, están promoviendo gran cantidad de bandas, muchas de las cuales buscan arriesgar.

Lo de Polyfrenetics no cambiará el mundo, pero es lo suficientemente entretenido como para dejarnos con una buena impresión y a la expectativa de un primer album.