TOP 5 Black Metal de los 90´s (Segunda Parte)

Ahora viene la parte más compleja, la que va a traer entredichos, opiniones totalmente dispares, argumentos sólidos sobre los conceptos vertidos, pero con la idea macro de que este es mi top 5; por lo cual es hermoso generar polémica. La misma nos mantiene mentalmente activos, ya que nos fuerza a discutir (con altura) a estudiar los puntos e incluso a aceptar opiniones ajenas cuando vivimos en tiempos donde esto es utópico.

Esta segunda mitad del top 5 del Black Metal de la década del ’90, nos puede generar un sinfín de situaciones, choques de pasiones, pero donde tiene que regir la objetividad, ya que esta es difícil de mantener cuando se toca una temática tan amada por quien escribe.

Pasando bálsamo en nuestras pieles curtidas al advenimientos del conflicto creciente, comenzamos con este camino repleto de odio, oscuridad, blasfemia, terror y todos los conceptos clásicos del Black Metal (entiéndase Cold, Satan, Forest, Throne, Evil, Darkness, etc).

«El Black Metal es un arte único que nos permite expresar todo tipo de emociones humanas. Eso es un regalo. Y como dije, mis inspiraciones son mis autorreflexiones. Y siempre están llenos de emociones reales y consideraciones reales de la naturaleza humana» Ash, lider de Nargaroth.

Primera parte aqui

1995 – Dissection «Storm of the Light´s Bane»

Empezamos con la pierna en alto, directo al pecho, para ablandar nuestros malotes corazones y generarle ternura, esa ternura que solo llega con leer el nombre Dissection. Más en la ocasión que nos convoca aquí, el enorme disco «Storm of the Light´s Bane». Hermoso disco, para muchos (y comparto) piedra angular de una nueva corriente dentro del Black, como lo es la rama Melódica.

La cantidad de riff melódicos, de pasajes donde reina la armonía junto con el frío gélido, congelando todo, brindando un aura a todo el disco que es simplemente perfecto. No puedo extenderme mucho sobre este álbum, ya que más adelante realizaré un especial sobre el mismo cuando cumpla fecha de su lanzamiento.

Trabajo indiscutible, tanto para propios como para extraños; todo suena preciso, todo encaja. Una obra maestra surgida de una de las mentes más privilegiadas en cuanto a composición como la del difunto Jon Nodtveidt.

1996 – Satyricon «Nemesis Divina»

Disco que marcó el quiebre de un camino, de la unión de dos corrientes profundas dentro del Black Noruego. Hay que tener un problema severo en las trompas de Eustaquio para no admirar semejante belleza sonora.

Este trabajo es un paso hacia adelante, alejándose progresivamente de aquel «Dark Medeval Times» y «The Shadowthrone» donde reinaba el caos, aquí todo juega a la par, nada sobresale por lo alto totalmente despegado. Los momentos extremos se profundizan, y los pasajes melódicos tétricos son el brillo notable que nos deja ese gusto único.

Inigualable, y por mucho un disco que ha sido calcado hasta el hartazgo por futuras promesas incumplidas del BM. Lo bueno de Satyricon es que supieron aprovechar la ola de popularidad y aceptación para estar en la élite del género, a mérito propio, ya que es un grupo sumamente sólido.

Reseña completa aqui

1997 – Emperor «Anthems to the Welking at Dusk»

Por lejos el año mas complicado para elegir solo un disco °.
El segundo disco de Emperor nos brinda momentos más eléctricos, de mayor vibración extrema que el anterior discazo «In The Nightside Eclipse».
Obra que definitivamente puso en lugar a un conjunto de élite, superior, que a lo largo de su historia llevo el género a otro nivel donde lo progresivo, la técnica y la velocidad se dan la mano.

Este álbum muestra la calidad exquisita de composición por parte de Ihsahn a la par en algunos tracks por Samoth. Teniendo al «Thus Spake the Nightspirit» y «With Strength I Burn» como las más sobresalientes dentro de una placa sin desperdicio alguno. Realmente una obra maestra.

1998 Cradle of Filth «Cruelty and the Beast»

Es necesario darle crédito a un conjunto que en sus primeros años tuvo momentos épicos y gloriosos, que en este trabajo, el tercero en la carrera y con el cual comenzaban una progresiva decadencia en cuanto a composición, muy leve, pero la cual se iba a reafirmar con el «Nymphetamine«.

La muestra cabal de la pluma de Dani Filth en su disco conceptual, donde se mezcla lo teatral con lo crudo, momentos de lujo donde el enorme Nicolas Barker se luce por completo en la percusión. Riff pegadizos, violentos, melodías agradables de principio a fin y uno de los mejores discos donde el Gótico se hace presente con fuerza.

1999 Windir «Arntor»

Brillante sonrisa sería la de cualquier pagano amante del genero tuviera al escuchar esta belleza, de las bandas menos valoradas y con mejor calidad en este camino turbio del Pagan/Viking Black Metal.

Épico, majestuoso, con momentos donde se vuelca hacia lo raw como en «The Burial Mound of King Hydnes» donde todo suena crudo, violento, a su vez estando cubierto por la precisa ambientación melódica para llevarnos a esos paisajes que el fallecido Valfar quería dirigirnos. Un olvidado que debe decir presente, más en este crudo invierno en el Sur.

° Nota: El año 1997 fue complejo ya que a mi gusto fue de los mejores años por lejos dentro del genero, viendo la luz discos como «Enthroned Darkness Triumphant» de Dimmu Borgir, , «Arising Realm» de Ragknarok, «The Older Domain» de Borknagar, «Under the Sign of Hell» de Gorgoroth, y «Following the Voice of Blood» de Graveland, entre otros.

Para cerrar, me voy a tomar libertad (aún más) para brindar una opinión personal. Fue, es y será necesario para mí hablar sobre el Black Metal, ya que es, para mí, mucho más que Música, es la expresión artística más violenta y genuina del Ser Humano. Quitando todo lo mundano, quitando las drogas y las locuras, quitando la Política, quitando todo aquello que pueda perturbar la claridad, eliminando todo lo que estorbe en nuestros corazones y mentes, podemos abrazar algo que sale desde las entrañas, desde lo más profundo del Hombre. Eso debería ser abrazable, promovido, apoyado; esto va más allá de la música de una cruz invertida o de corpsepainting.

Siendo de los movimientos más herméticos que existe en el Planeta (el continuo cuestionamiento al Hombre…, el existencialismo, la misantropía y el nihilismo a flor de piel), este arte brinda todo tipo de emociones en mi ser, y cuando la música te genera algo dentro de vos, es que funciona, funciona perfectamente. Sigo teniendo las mismas sensaciones y vibraciones al escuchar esto, como lo hacía cuarto de siglo atrás. El Black Metal para mí es pasional y racional por igual.