Top 5 – discos de power metal italiano

Realizar un top de discos o bandas nunca es tarea fácil. Nunca queda nadie contento y las opiniones suelen diferir un montón. Ahora, la tarea resulta un poco más ingrata cuantas más variables vamos teniendo en cuenta para realizar dicho top.

Hoy nos vamos a Italia para buscar los cinco mejores discos de power metal del país. Hay elecciones que son muy claras, algunas más conocidas que otras, pero lo que si es seguro, es que todas son recomendables, ya sea para revisitar o para escuchar por primera vez.

A todos los lectores, quiero que sepan que tuve que elevar mi objetividad al máximo, porque por las características de la escena del power metal italiano, este top perfectamente podría estar compuesto por discos donde cantó Fabio Lione o por varios discos de una misma banda.

5 – Trick or Treat – Tin Soldiers (2009)

Trick or Treat no son precisamente una banda nueva. Formados en 2002, oficiaron en sus inicios como banda tributo a Helloween y comenzaron su carrera discográfica propiamente dicha en 2005 con “Evil Needs Candy Too”.

La banda cuenta en total con seis discos y se caracteriza por encarnar a la variante más “happy” del power metal, con melodías alegres y voces realmente agudas.

En esa discografía podemos encontrar un poco de todo, dos discos conceptuales basados en la película Watership Down, un disco de openings de series de dibujos animados y hasta un disco entero dedicado a los Caballeros del Zodíaco.

Sin embargo lo que los trae a este top es el disco “Tin Soldiers”. Las influencias directas de Helloween, encauzadas hacia un estilo más propio son la marca de este disco. Riffs veloces, melodiosos solos de guitarra, estribillos con mucho gancho y por arriba de todos eso, la voz de Alessandro Conti, cuyo desempeño lo ha llevado a formar parte de uno de los tantos proyectos de Luca Turilli y también a integrar una banda bastante reciente como lo es Twilight Force.

Se gana a la fuerza el quinto puesto de este top gracias a canciones como “Paper Dragon”, “Take Your Chance”, “Freedom” y las excelentes colaboraciones con Michael Kiske en “Hello Moon” y en la balada “Tears Against Your Smile”.

4 – Thy Majestie – Jean d’Arc

Oriundos de Palermo, Thy Majestie inició su camino inspirándose 100% en la Edad Media como hilo conductor de sus primeros discos.

Tras dos buenos trabajos, “The Lasting Power” y “Hastings 1066”, lanzaron el disco que los trae a este top: “Jeanne d’Arc”.

El título lo dice todo. Un disco completo enfocado en la historia de la guerrera Juana de Arco. Como trabajo conceptual es excelente y funciona de gran manera. Instrumentalmente es muy sólido y es particularmente destacable el trabajo realizado a nivel de teclados que dotan al álbum de epicidad y grandilocuencia. No obstante, no sacrifica en ningún momento el apoyarse en guitarras más pesadas de lo normal.

Tras la introducción de rigor con “Revelations” pasamos directo con la apertura a toda velocidad con “Maiden of Steel”, marcando lo arriba que está la barra. La calidad se mantiene a lo largo del disco con canciones pegadizas y trabajadas como “The Chosen One”, “Ride to Chinon”, la épica e hímnica “For Orleans” o la teatral “Time to Die”.

Francamente imperdible y altamente recomendable.

3 – Vision Divine – Vision Divine (1999)

Mientras Rhapsody ganaba más tracción como exponentes considerables del power metal de corte más sinfónico, en la toscana nacía Vision Divine, que terminaría siendo una de las bandas de más peso en la escena del power metal italiano.

Creadores de varios discos de importancia considerable, su entrada en este top se debe a su disco debut, también titulado “Vision Divine”.

Si bien hay una fuerte participación de los teclados en los arreglos y los solos, el disco se apoya con más firmeza en riffs y pasajes veloces de guitarra rítmica más pesados. Podemos decir que en este disco son la respueta italiana a Stratovarius, particularmente gracias al trabajo de su fundador, el guitarrista Olaf Thörsen.

El as en la manga de este disco y formación de Vision Divine, es Fabio Lione, que en la actualidad debe ser uno de los cantantes con más participación en diferentes bandas a lo largo y ancho del mundo. De Lione no hay mucho que decir, canta donde quiere y como quiere… y funciona siempre.

Un disco con suficiente variedad, goza de temas más directos y agresivos como “New Eden”, “Exodus” o “Forever Young”, mientras que el estribillo más ganchero llega con “On the Wings of the Storm”. “Vision Divine” y “The Miracle” son las apuestas más teatrales que solo son superadas por “Of Light and Darkness”.

Con 22 años de existencia, sigue siendo un disco más que vigente.

2 – Labÿrinth – Return to Heaven Denied (1998)

Formada en 1994 y también integrada por Olaf Thörsen, Labÿrinth es una de las bandas más veteranas de este top.

Su segundo disco “Return to Heaven Denied”, el primero donde Roberto Tiranti ejerce como vocalista, es una auténtica joya del power metal italiano, a veces escondida detrás de bandas que alcanzaron un mayor éxito internacional y que están al frente en las portadas. Si hay una banda para fans “old school” de power metal, es esta.

Desde la gran apertura con “Moonlight”, pasando por canciones como “The Night of Dreams”, “Lady Lost in Time” y “Heaven Denied”, las más pesadas “Thunder” y “Time After Time” y la más cercana a una balada, “Falling Rain”, cerca del cierre del disco, “Return to Heaven Denied” constituye una escucha imperdible del power metal italiano.

1 – Rhapsody – Dawn of Victory (2000)

Indiscutiblemente, el primer puesto iba a ser para un disco de Rhapsody. Capitaneados por el guitarrista Luca Turilli y contando con Fabio Lione como cantante, la banda tuvo una seguidilla de excelentes discos desde su primer “Legendary Tales”. Tanto “Symphony of Enchanted Lands” como “Dawn of Victory” y “Power of the Dragonflame” eran grandes candidatos, asi que esta no fue una decisión fácil.

Cualquiera de esos tres podría ocupar el primer lugar en la lista gracias a su sonido y nivel de composición de canciones, ya que todos signficaron un aporte espectacular al setlist de la banda.

Lo que finalmente inclinó la balanza a favor del “Dawn of Victory”, es lo directo y agresivo del sonido del disco en comparación con el enfoque más sinfónico del anterior, pero sin llegar a ser tan oscuro como su sucesor “Power of the Dragonflame”.

Vamos directo al grano, la intro instrumental del disco, “Lux Triumphans”, crece de forma ominosa para desembocar en el clásico infaltable “Dawn of Victory”, constituyendo la primera gran impresión de un álbum que ofrece canciones que a veces son un poco pasadas por alto como “Triumph for My Magic Steel” o “The Bloody Rage of the Titans”.

Entre sus más reconocidas además de “Dawn of Victory” están “The Village of Dwarves”, “Dargor, Shadowlord of the Black Mountain” y otro infaltable, “Holy Thunderforce”.

El tramo final del disco, compuesto por “Trolls in the Dark”, un instrumental donde Turilli hace gala de su talento como guitarrista, y la dupla “The Last Winged Unicorn” y “The Mighty Ride of the Firelord”, ofrecen un cierre épico y grandilocuente que está a la altura de los mejores momentos de la banda.

No se puede hacer justicia a Rhapsody eligiendo un solo disco de su época dorada como el mejor, asi que lo que yo suelo sugerir es que escuchen todo lo que tenga que ver con la “Emerald Sword Saga”.

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